Y algo jamás pensado llegó un día...

 Coronavirus,  algo que pocos meses atrás ignorábamos totalmente y ni cerca de imaginarlo, y un día apareció,  pero así como llegó, también se irá, sólo que no sabemos cuando... 

Rogando y agradeciendo a Dios, sea lo más pronto, la incertidumbre es lo que prevalece,  mientras tanto la opción es,  tener mucha actitud positiva, educarnos y llenarnos de valentía para protegernos y no permitir que nos invada, ordenando a nuestro sistema inmunológico  no dejarse vencer, vibrar en alta frecuencia.
Hay que estar claros, que  en adelante el rumbo de nuestras vidas cambió  totalmente.

Nos preocupa a todos una cuarentena prolongada mes a mes,  obviamente ha sido necesario,   no podrmos echar paea atrás el esfuerzo realizado, hay que continuar con mucha paciencia, tenacidad, con las  medidas de protección, día tras día, es por rl bien de todos, sin distingos, absolutamente de todos en sus casas,   continuando con el "home office",  aunque unos  han quedado cesantes en sus trabajos y  otros incorporándose poco a poco en la medida de lo posible, en fábricas, oficinas, comercios,  en todas partes del mundo, los niños y jóvenes continúan en sus aulas virtuales, los mayores resguardándose aún más por ser  los más vulnerables, todos conscientes de la realidad.

Sabemos que esto es una situación crítica...sí una crisis y como tal, acompañada de graves consecuencias en todo sentido, pero  consideremos  que  lo mas importante en toda situación de contingencia es mantener la calma para poder afrontarla  y  seguidamente observar qué enseñanzas, oportunidades podemos obtener.

En un principio,  asimilar que está pasando. 

A estas alturas ya estamos más conscientes.

Proyectamos con más claridad nuestros pensamientos.

Convirtamos la cri$i$ en oportunidades

No caigamos en desesperanza, al contrario,  tomemos  fuerzas y sigamos arriba, en alta frecuencia.

Esto es lo más recomendable para nuestra salud,  estabilidad física, mental y por ende, salir adelante en lo que a trabajo, negocios, se refiere, analizar con qué  ingresos contamos, si no los tenemos reinventarnos, si los tenemos, multiplicarlos,  no paralizarnos, decidir qué vamos a hacer, cómo lo vamos a hacer, en fin, construir,  reconstruir, inventar, reinventar,  es decir, sincerar cómo está nuestra situación económica y financiera en este momento, cómo multiplicar, diversificar lo que tenemos, en qué sectores debemos invertir el dinero,  si ha sido solo en el banco, en inmuebles y liquidez tenemos? 

Podemos hacer las cosas mejores,  reflexionemos. Clave es  pensar, actuar, ejecutar y entender que de lo  que hagamos  hoy depende nuestro futuro,  sin miedo  y si lo hay, no importa, él es libre y entonces, que sea nuestro aliado.

Es un mito que hace falta  demasiado dinero para incursionar en un emprendimiento o realizar otro tipo de inversión. 

Lo aconsejable es que nos informemos, investiguemos, antes de tomar decisiones busquemos asesoría profesional, para cada tema hay especialistas,  por algo será. 

 De lo que no cabe duda es, que ahora más que nunca, con todo lo que estamos pasando, que estamos aprendiendo, es que debemos ser previsivos en todo y que de las decisiones que tomemos hoy dependerá nuestra tranquilidad del mañana. 

"Definitivamente, las mejores decisiones de hoy representan nuestra tranquilidad  de mañana"

"El futuro depende de lo que hagamos hoy"